La nueva batería para coches eléctricos creada por españoles: más autonomía y más económica Pablo Martín NOTICIA 18.02.2025 - 07:00h
Los coches eléctricos se han convertido en los grandes protagonistas de la movilidad urbana e interurbana tanto en España como en todo el planeta, y es que el sector de la automoción lleva años virando hacia la electrificación y dejando atrás los motores de gasolina y diésel. Eso sí, la tecnología no deja de avanzar, por lo que prácticamente cada día salen nuevos avances e inventos que podrían revolucionar el mercado.
Una de las últimas invenciones en lo que al sector de los coches eléctricos se refiere no ha salido ni de las brillantes mentes del MIT en Estados Unidos ni de los laboratorios más vanguardistas de Japón, sino de España, concretamente de Córdoba. Científicos de la universidad andaluza han creado una batería innovadora que no solo puede llegar a tener mucha más autonomía que las que se montan en la actualidad en los vehículos, sino que su precio podría ser significativamente menor.
Los científicos del Departamento de Química Inorgánica e Ingeniería Química del Instituto Químico para la Energía y el Medioambiente (IQUEMA), dependiente de la Universidad de Córdoba (UCO), han elaborado una batería de sodio y azufre (Li / Na-S) capaz de soportar hasta 2.000 ciclos de carga. Según sus propias palabras, publicadas en el Journal of Power Sources, "la tecnología de las baterías de metal - azufre es una de las más prometedoras debido a su alta y específica capacidad de 1675 miliamperios hora por gramo de masa (mA h/g)",
Esto se debe principalmente al azufre, aunque eso conlleva que se degrade de manera rápida debido a la "disolución del polisulfuro metálico". Esta investigación ha conseguido frenar ese desgaste gracias a sustituir elementos de la batería: el propulsor está compuesto por un ánodo y un cátodo, es decir, un electrón negativo y otro positivo que están conectados por electrolitos que se solidifican con el tiempo.
Lo que han hecho los investigadores es cambiar los elementos químicos tóxicos de esos electrones por azufre, a la par que se ha eliminado el litio y se ha introducido en su lugar sodio. Todo ello ha hecho que la batería gane más energía, gracias también a la acción del hierro, y según los datos del estudio, el propulsor tan solo perdió un 0.08% de su potencia a lo largo de 2.000 procesos de carga.
Aunque todavía se deben perfeccionar estas baterías, no deja de ser toda una revolución en el sector de los coches eléctricos, un mercado que no ha parado de crecer en los últimos años. Además, al utilizar elementos más baratos que los propulsores actuales, como el hierro, podría tener un impacto positivo en el precio de los automóviles, pero para ello todavía habrá que esperar bastante tiempo.