Se avecina la importación de GLP y gas para electricidad - El Diario 14-9-2025

Dos exministros de hidrocarburos advirtieron que, tras dos décadas de casi ausente exploración en hidrocarburos, el nuevo gobierno tendrá que afrontar una crisis energética más profunda que contempla la importación también de Gas Licuado de Petróleo (GLP), gas natural para la generación de electricidad y funcionamiento de vehículos a GNV, además de gas para los comercios y las industrias del país. Esto se sumará a la importación de gasolina y diésel que ya complica la economía del país.

Rodrigo Paz, al igual que Jorge Quiroga, creen que con un poco de plata pueden solucionar el problema de diésel y la gasolina, pero no saben que además se les viene el problema de la escasez de Gas Licuado de Petróleo (GLP) y del gas natural; no saben que tienen que pagar las deudas a las petroleras y luego negociar para que hagan inversiones en el país, manifestó el exministro de Hidrocarburos, Álvaro Ríos.

“Necesitamos que los candidatos cuenten la verdad al país, que ya no digan que pueden dar bonos o pueden solucionar los problemas en cien días, estamos arruinados, no hay plata. Los candidatos no están contando la verdad y por ello aparecen como los Mesías, a esos Mesías el pueblo no les va dejar llegar ni siquiera al Carnaval. Prepárense para sufrir”, alertó.

Entretanto, el exministro de Energía e Hidrocarburos, Ángel Zannier, advirtió que entre los años 2028 y 2031 las curvas de la oferta y demanda de gas natural se cruzarán, lo que significa que Bolivia tendrá que comprar ese hidrocarburo de la Argentina, si es que no se toman medidas urgentes para paliar esa difícil situación.

Zannier recordó que el 50 por ciento del gas natural que se produce en el país sirve para generar electricidad y, por lo tanto, el impacto en la economía será de grandes proporciones. Para que se frene la llegada de este problema, el próximo gobierno debe realizar urgentes cambios normativos que involucren la elevación del precio del millar de pies cúbicos de 1,3 dólares a 2 dólares, lo cual posibilitará las inversiones para energías renovables como la hídrica, solar y eólica.

En el año 2017, nuestro país tenía 10,7 trillones de pies cúbicos de gas, TCF en inglés; sin embargo, en la última certificación de finales de 2023, las reservas descendieron a 4,5 TCF, o sea, menos de la mitad, al parecer este año ya están por debajo de los 2 TCF.

Respecto a la producción de gas, que era el factor más importante de ingresos de dólares para la economía boliviana, Ríos dijo que ésta seguirá en declinación, ya que en los últimos 20 años se han usado 13 trillones de pies cúbicos de gas (TCF) y hasta fin de este año tendremos menos de 2 TCF de reservas.

En procura de un paliativo, el exministro Zannier sostuvo que se debe ir eliminando paulatinamente el subsidio al gas natural para la generación eléctrica con fórmulas que no afecten, de manera gravitante, al consumidor final. Lo primero que hay que hacer es sincerar los precios para que haya incentivos para producir, la Cámara Boliviana de Hidrocarburos y Energía ha planteado una modificación a la ley de incentivos que consiste en aumentar un dólar al gas natural para el mercado interno, la renegociación de las condiciones actuales de los contratos petroleros y la reducción de la burocracia administrativa para el tratamiento de estos temas.